jueves, 31 de julio de 2014

PRACTICA "EJERCICIO MODERADO"

Muchas veces nos quejamos de no hacer ejercicio por no disponer de tiempo suficiente para practicarlo, otras veces porque no disponemos de gimnasios cercanos; o bien porque no contamos con aparatos necesarios a nuestro alcance y otros tantos motivos que pueden ser pretextos para no adquirir la disciplina de iniciar una nueva rutina de la que no conocemos mucho y por lo mismo se nos dificulta decidirnos a empezar.

Lo cierto es que podemos dedicar treinta minutos al día a una actividad moderara como puede ser: caminar en un parque cercano, subir escaleras o montar una bicicleta que pueden ser los ejercicios más a nuestro alcance y lo cierto es que la condición adquirida por esos pocos esfuerzos, puede ser culpable de dejarte ligeramente falto de aliento al principio.

Anteriormente se tenía la idea por algunas personas conocedoras de estos menesteres, que para mejorar la condición física el ejercicio debía durar de 15 a 60 minutos; ser lo bastante intenso para acelerar el pulso entre 60 y 90 % de su nivel máximo y practicarse al menos tres veces por semana.
Sin embargo, leía yo en una revista especializada que en los inicios del año 2000, unos científicos de los Centros de Control de Enfermedades y del Colegio de Medicina del Deporte de Estados Unidos, hicieron una nueva propuesta sobre la práctica de “Ejercicio Moderado”.

Esta nueva propuesta y en opinión de ellos, sugieren que ya no hace falta calcular la frecuencia cardiaca ni esforzarse al máximo en la práctica del ejercicio. Proponen que casi cualquier actividad física que puede consistir en arreglar el jardín en casa, o jugar a la pelota con los hijos, puede aportar los mismos beneficios para la salud. Solo se requiere un tiempo de 30 minutos al día que son suficientes para tener el cuerpo en movimiento y poder conseguir máximos resultados.

Durante el desarrollo de la investigación existían muchas dudas si la práctica del ejercicio moderado funcionaría y con ello comprobar que la respuesta podía ser similar a la que se consigue con la práctica del ejercicio tradicional. La única forma de comprobarlo podía ser mediante la comparación del ejercicio moderado y el ejercicio vigoroso, comparar los resultados en las personas. Estas comparaciones dieron motivo en el año de 1994 con voluntarios que tenían inscritos en sus instituciones. Fue hasta el año 1996 cuando se anunciaron los primeros resultados.

Los resultados conseguidos de los dos grupos que permanecieron en observación, dieron la respuesta de haber obtenido prácticamente los mismos beneficios que aquellos que habían seguido la práctica del programa tradicional del programa tradicional de gimnasio.

Los beneficios no se dejaron esperar y fueron casi similares en los dos grupos. Los que hicieron ejercicio moderado quemaron casi las mismas calorías extras (159 al día, en promedio) que sus equivalentes al ejercicio practicado en el gimnasio. Esto es que la práctica del ejercicio moderado, no es propiamente (miel sobre hojuelas) de sencillo. Mover el cuerpo durante 30 minutos al día, representa hacer un verdadero esfuerzo y con ello alcanzar el ritmo óptimo es más difícil de lo que se cree.

Se trata de caminar a paso fuerte, seguir a un ritmo que obligue a respirar más de prisa tras un par de minutos, quemar al menos 4.5 calorías por minuto y de preferencia eliminar cada día de 150 a 200 calorías extras, o entre 1000 y 1500 a la semana. Cuanto más vigoroso es el ejercicio, con mayor rapidez se queman calorías y los ejercicios pueden ser: nadar, correr o pedalear, uno quema el doble de calorías por minuto que al caminar, y tú puedes practicar alguno de estos ejercicios la mitad de tiempo y obtener beneficios similares. Subir escaleras corriendo, saltar la cuerda o emplearse a fondo en una corredora o remadora que permite quemar mayor número de calorías.


Tu puedes hacerlo, solo es que te decidas mediante la disciplina de iniciar una nueva rutina que te permita diariamente cumplir un programa, no importando la clase de ejercicio que elijas practicar, lo que importa es convertir la actividad en…un nuevo hábito para toda la vida.

martes, 29 de julio de 2014

BUENA SALUD-SANA COSTUMBRE.

Cada semana me reúno con un pequeño grupo de compañeros de mi generación y por consiguiente “jóvenes” con edades cercanas a los ochenta años, lo que ha modificado un poco nuestro aspecto físico: color y escasez del pelo, arrugas marcadas, peso corporal y otros tantos factores que son signos del tiempo que ha dejado pequeñas huellas en nosotros, pero con el mismo humor de antaño y mejores recuerdos de tiempos vividos en plenitud de actividades.

En ocasiones hablamos de los últimos decenios, mencionando que la medicina ha logrado controlar de las principales enfermedades infecciosas que aquejan a la humanidad, pero aún es impotente para aliviar los males crónicos que nos causamos nosotros mismos por nuestra ignorancia y por no aprovechar los conocimientos que ya son del dominio público como es el caso de alcanzar “la buena salud” que es o debería ser algo muy divertido.

Nuestras reuniones las hacemos en un acostumbrado desayuno los días viernes. Conozco mucha gente que no acostumbran desayunar para cuidar el peso o porque no les da tiempo de hacerlo. En opinión de especialistas en nutrición, opinan que la primera comida del día debe ser fuerte, e incluir alimentos ricos en proteína, como el huevo, la leche y cereales, que se absorben con mucha menor rapidez que el azúcar simple y, por tanto ayudan a mantener un nivel adecuado de energía durante la mañana, sobre todo cuando se desarrollan jornadas fuertes de trabajo ya sea manual o intelectual.

Otra función que se ignora, es la de hacer poco caso a la respiración. Ya Voltaire decía desde hace más de dos siglos: “Muchas de las enfermedades humanas se curarían con la respiración” lo que en una época sedentaria como la actual con los aparatos electrónicos en uso, poco caso se hace de ejercitar esta función. Cuando disponemos de algún momento libre y podemos practicar la respiración profunda, continuamos disfrutando frente al televisor o bien “twitteando o contestando correos” como sana costumbre y utilizando apenas la décima parte de nuestra capacidad pulmonar, en vez de practicar algún ejercicio que promueva una mejor oxigenación de la sangre.

Hablando de ejercicio corporal, ignoramos la práctica de algún ejercicio corporal necesario para beneficio de nuestro cuerpo. Hipócrates que fue considerado el padre de la medicina decía: “Todo aquello que se usa se desarrolla; todo aquello que deja de usarse, se atrofia” Sin ejercicio nuestro organismo se atrofia y podemos volvernos obesos, además de quedarnos sin aliento al menor esfuerzo, nos sentimos cansados con propensión a enfermedades cardíacas.

Algo que podemos considerar intrascendente es promover con frecuencia “la risa”. Hace más de 2000 años Aristóteles consideraba la risa como un ejercicio corporal de efectos preciosos para la salud. Posteriormente filósofos y siquiatras, desde Platón hasta Freud, estuvieron de acuerdo con el acto de reírse porque se caracteriza por la impensada liberación de las tensiones que tanto afectan actualmente a la humanidad, probando que la risa ayuda a la buena digestión al estimular las secreciones glandulares, relaja la musculatura, dando brillo especial a la mirada.

Y así encontramos varios factores a los que damos poca importancia y sin embargo  contribuyen en forma efectiva a la conservación de nuestra salud, que ni siquiera miles de hospitales y clínicas pueden asegurar, porque son obra de nosotros mismos. Ahora encontramos muchas ficciones emitidas por laboratorios y dispensarios médicos que hacen recomendaciones y medidas sanitarias con fines de mercadotecnia que tampoco lograrán esa finalidad ya que el mantenimiento de una buena salud… “Sólo depende de cada uno de nosotros”


Estos son algunos de los diversos comentarios que hacemos en grupo de amigos ochentones y es la razón por la que promovemos estas razones, para promover otro motivo de conservación de una buena salud, como es la de promover las “Frecuentes ejercicios sociales”

jueves, 24 de julio de 2014

¿HA HABLADO DE DIOS CON SUS HIJOS?

Esta es una preocupación que tiene inquietos a muchos padres de familia, a pesar de que sienten la confianza de comentar cualquier tema con sus hijos, pero cuando se trata de algún aspecto abstracto como es la divinidad, no saben cómo deben iniciar una plática, sabiendo de antemano que es muy importante satisfacer esta necesidad que es parte de la formación de sus hijos.

Muchas veces los padres dan a sus hijos una preparación sobre conocimientos que consideran muy necesarios como pueden ser: la música, los conocimientos de computación, el estudio de otro idiomas y materias que consideran muy importantes, pero al no saber iniciar un tema relacionado con la fe, olvidan lo que dicen y hacen, sin dejar una huella duradera en el conocimiento de sus hijos.

Muchos expertos en religión, son de la idea que deben esperar a que los hijos sean los que aborden ese tema en diversas preguntas a sus padres y es el momento adecuado para hablar de Dios con mucha naturalidad a sus hijos. Hablar a los hijos sobre temas divinos les infunde mucha confianza y seguridad, sobre todo si sus padres son los que deben asesorar y hacerles reflexionar cuando una parte del alma y sentimiento infantil está ávida de diversas interrogantes de fascinación y misterio.

Tengo un amigo que me comenta que cuando su hija era pequeña, le preguntó alguna vez: ¿Cómo podría ver a Dios? Y él con mucha tranquilidad le respondió ¡Dios es como el viento, no lo podemos ver pero sí lo podemos sentir!. Y esa plática le dio pauta para continuar platicando que Dios está en nuestros corazones y es una forma en que nos permite querer y respetar a nuestros semejantes.

Deben establecerse las bases para que los hijos  entiendan la idea del amor y el cuidado divinos que es una idea importante que debe transmitirse sobre Dios, indicándoles que Él siempre está con nosotros, que nos acompaña a todas partes y que no nos abandona en ninguna búsqueda ni en ninguna lucha por difícil que ésta sea.

Es importante estar pendiente cuando los hijos dejan atrás la infancia, porque empiezan a sufrir cambios radicales que se reflejan no solo en su organismo, sino también en su manera de pensar y con ello empiezan a sentirse con mayor independencia y es cuando debe dejarse en ellos las ideas fijas sobre Dios. Sobre todo porque serán ellos mismos los que empiezan a forjarse su propia idea de la divinidad, afirmando las ideas de su formación religiosa que le servirá para guiar su vida en un futuro cercano y lejano a la vez.

Los muchachos ya en plena adolescencia y al formarse su propio juicio sobre temas religiosos, se rebelan ante las enseñanzas religiosas y es el momento de dejarles en libertad para que reaccionen con sus ideas, considerando que los principios ya se los hemos inculcado desde pequeños y esa manera de pensar puede ayudarles en forma natural, a que sus reacciones sean de acuerdo a sus sentimientos; es la mejor forma en que se les puede dejar que operen de acuerdo con su “libre albedrío”.

Al final habremos dado a nuestros hijos la seguridad de que Dios existe y que es una herramienta moral que les puede servir espiritualmente para toda su vida.

martes, 22 de julio de 2014

EL PODER DE LA ORACIÓN.

Cuando hemos sido educados desde niños en la práctica de una religión, recibimos instrucciones de algunas costumbres que son necesarias en nuestra participación de los ritos religiosos Cuando llegamos a la mayoría de edad, tenemos en mente la práctica de rezos que utilizamos  en varias ocasiones, cuando acudimos a eventos místicos.

Con estos conocimientos y prácticas hemos crecido y sabemos el poder de la oración, es una materia que los científicos ignoran, y en algunos casos están descubriendo lo que los creyentes hemos sabido siempre por considerar que durante nuestra vida hemos utilizado la oración en muchas ocasiones, a pesar de que a mucha gente le puede parecer una trivialidad.

La práctica de la oración se ha demostrado frecuentemente cuando conocemos el caso de algún enfermo o cuando hemos tenido serios problemas que necesitamos un recurso para conseguir ayuda para nuestra causa y son casos de acuerdo a nuestras creencias, donde conseguimos resultados positivos. El poder del amor es necesario en nuestras peticiones, con el fervor lo hacemos en los casos de un ser querido. A lo largo de la historia se conocen respuestas, que al hacer las peticiones con cariño y ternura, se reciben valiosas respuestas que son muy valiosas e influyen en los resultados de cientos de creyentes.

Las personas que frecuentemente utilizan estos recursos como son los sanadores que recurren a la fe y la oración, consideran que el amor es la fuerza que influye para la obtención de resultados positivos. Tener la sensación de afecto y solidaridad es tan intensa que suelen describirla como una “comunión” con la persona o grupos de personas que rezan con mucha devoción ante un altar en un culto, o fuera de él.  

Mucha gente utiliza como un recurso de oración “el poder de la meditación” es una concentración completa y encuentra como respuesta el rezo. Los efectos curativos de la oración han sido demostrados por diversos estudios publicados por unidades médicas del Hospital General de San Francisco, con ayuda de recursos electrónicos, y pedimentos de rezos diarios para conseguir la sanación de sus enfermos, hasta que fueran dados de alta, con resultados sorprendentes que muchos de ellos han sido publicados en los medios de difusión y boletines médicos.

Las oraciones centradas en la confianza pueden ayudarnos a llevar nuestras peticiones en un estado de paz interior en nuestros corazones, de los que desaparece el temor y con ello se consigue el apaciguamiento de la mente. La confianza en un poder superior y en nosotros mismos es sin duda canalizar las cosas hacia un poder supremo como una fuerza en nuestras vidas.

La oración es un recordatorio de nuestra ilimitada naturaleza de esa parte de nosotros que es infinita en el tiempo y en el espacio, la afirmación del universo de que no estamos solos. Cuando rezamos con frecuencia por medio de plegarias de confianza, valoración, comunión o lo que nos funcione, los frutos aparecen en todos los aspectos de nuestra vida. Todo lo que tenemos que hacer es conectar la presencia divina y encontrar un espacio de nuestra paz interior en nuestro corazón para irradiar todo lo que afecte a nuestras vidas. En ese momento nuestro temor desaparece y lo sustituye una sensación de amor, paz y seguridad.


En mi caso he rezado toda mi vida y me siento muy reconfortado en todas mis actividades porque me siento fortalecido y lleno de paz interior, sobre todo lo que más me ha servido que nunca estoy solo y que siempre me acompaña alguien que me orienta y lo considero como mi consejero en todo momento…  ¡Y me ha dado resultado su compañía!

jueves, 10 de julio de 2014

CREER EN UNO MISMO.

Tuve oportunidad de participar en  una plática, donde el orador hacía mención especial en lo importante que es sentirse uno seguro de sí mismo; esto es, la relación más importante que tenemos en la vida es la que tenemos con nosotros mismos. En la familia, en las amistades, en los compañeros de trabajo donde manejamos un trato frecuente, incluidos en los matrimonios cuya duración puede llegar a ser de toda una vida, llega un momento en que finalmente se acaba.

En cambio, la relación que tenemos con nosotros mismos es eterna, por lo que siempre tenemos el compromiso de sentirnos bien disfrutando del compromiso de estar bien, con un dominio absoluto de nosotros mismos, con la idea de un completo relajamiento mental y corporal, sin pensar en la salud mental y el compromiso de sentirnos bien, de vivir contentos, sin sentirnos abrumados por las preocupaciones del mundo actual y todos sus cambios que son tan frecuentes en todos los ámbitos, que están llenos de preocupaciones y apremios.

Todo lo que nos hace falta es asumir plenamente la responsabilidad de nuestra propia vida y ocuparnos de la tarea de cuidar de nosotros mismos y de nuestros actos. Esto no pretende significar que la existencia deba ser de un constante sacrificio; en realidad lo que mejor podemos hacer es disfrutar plenamente de la vida por ser la mejor receta de que podemos disponer para conservar nuestra salud.

Para sentirnos bien debemos conocer bien nuestros sentimientos y nuestros deseos y siempre prestar atención a todas nuestras actuaciones. Por supuesto que para sentirnos mejor, no debemos descartar nuestra alimentación que debe ser balanceada y completa, así como la práctica constante de una rutina de ejercicio manejado en forma diaria que viene a ser el complemento de una cultura de salud y bienestar.

Es importante disponer de una buena relación con nosotros mismos, ya que de no ser así, ¿Cómo puedo querer tenerla con otra persona? si yo mismo no puedo responder a mis propias necesidades, siempre estaré buscando a alguien que me complete mis decisiones y pensamientos, creyendo que con ello puedo ser feliz y sobre todo que haga realidad todos mis sueños para el cumplimiento de mis metas. La misma situación puede ocurrir si nosotros tenemos una relación con otra persona que no se atiende y se cuida a sí misma, resultará imposible una identificación.

La vida la podemos considerar un espejo, siempre atraemos a personas que reflejan características similares a las nuestras, o las creencias que tenemos nosotros mismos y también las relaciones que manejamos que pueden ser coincidentes. Lo que otras personas piensan de nosotros corresponde a su propia limitación que tienen de la vida, hemos de aprender que la vida nos concede todo lo que deseamos y tenemos la facilidad de seleccionar lo que más nos conviene.

Has notado que cuando te sientes bien contigo mismo las demás personas también se tornan más agradables? ¿No crees que ya puedes ser amable y con ello observar un cambio de actitud de las gentes?


martes, 8 de julio de 2014

¡CELEBRACIÓN DE UN CENTENARIO!

Fui invitado el día de hoy por la Fundación Casa Hogar “Matías Romero” de la cual formo parte de su Patronato, a una comida que se organizó para festejar cien años de vida del señor Don Porfirio Grayda y Solís (Don Porfi) como cariñosamente se le conoce, acompañado de un hijo y una hija, así como autoridades de la Casa Hogar y los más de cincuenta residentes que se encuentran recluidos en dicha Organización.

En el desarrollo de este evento, uno de sus compañeros en representación de todos los residentes, tuvo a bien ofrecerle la comida con palabras emotivas que nos conmovieron a todos los asistentes y ofreció la comida con la siguiente carta:

“Carta a mi amigo Porfirio Grayda y Solís, 8 de julio de 2014.
Hoy cumples cien años estimado Porfi y se dice con pocas palabras pero es toda una vida.
Solo Dios sabe por qué te tiene acá en la tierra y tan lúcido como un adulto maduro.
Yo te quiero dar las gracias por la amistad. Al cabo de seis años que yo llegué a esta Casa Hogar, hemos pasado por muchas cosas.
Tu alimentación es muy buena. Siempre piensas en el “cafecito” o la “sopita caliente”. Cuando vas a un restauran, pides “sopa de fideos”, “bistec empanisado” con papas. En el desayuno y la cena, siempre tomas “tu media concha” de pan dulce
Para mí, una de las cosas que admiro en ti es la laboriosidad. Siempre estás haciendo algo en tu cuarto. Sales a caminar al jardín, sin dejar de platicar con el “perico”.
Tus hijos, nietos y bisnietos hoy están de fiesta, hay que darle gracias a Dios por este día inolvidable”.
¡FELICIDADES PORFIRIO!
Que Dios te llene de bendiciones.

Fueron palabras conmovedoras sobre todo de una persona que además de ser su amigo, lo cuida mucho y le procura más con el tiempo que le dedica. Don Porfirio es una persona que siempre tiene la sonrisa a flor de piel, pulcro, bien arreglado, con carácter agradable para todos en general. Sus familiares se mostraron muy agradecidos porque tres integrantes del patronato, le acompañamos a comer en su mesa, compartiendo el pan y la sal. En realidad los agradecidos fuimos nosotros porque pocas veces tenemos la oportunidad de estar presentes con una persona que está celebrando “Cien años de edad” es un verdadero acontecimiento digno de celebrarse.

Durante muchos años hemos permitido que los números de un calendario que corresponden a los años que llevamos en el planeta nos digan como sentirnos y la forma de comportarnos. Lo cierto es que viendo a Don Porfirio, se antoja a que cambiemos nuestras creencias sobre el hecho de hacernos mayores. Es de admirar su estado físico, el ánimo de vivir y la alegría mostrada en esta celebración centenaria, acompañado de sus hijos, sus amigos y la forma en que él se expresa de la Casa Hogar de la que dice textualmente: “mi casa”.

Cuando miro a mi alrededor y veo personas mayores débiles, achacosas y asustadas, pienso “Esto no tiene porqué ser así”. Muchos hemos aprendido que cambiando nuestros pensamientos podemos cambiar nuestra vida. Por eso sé que podemos hacer que esos años sean una experiencia positiva, vibrante y sana. Añadiría solamente a este blog, mi comentario:


Muchas Felicidades Don Porfirio.

jueves, 3 de julio de 2014

¡CONTINÚAN LOS COMENTARIOS!

Continúan los comentarios sobre el fútbol y sobre todo ahora que llegaron los jugadores a México y las reseñas han subido de tono tomando en cuenta que la derrota ha servido para hacer comentarios sobre la situación del país, demostrando que en unos cuantos minutos y al final del partido, cambió el panorama de alegría y felicidad a drama y tristeza, diciendo que con esto se alimentará una vez más el derrotismo mexicano.

Esa mezcla sería inútil, pero nos han hecho pensar de la serie de derrotas que ha sufrido el país a lo largo de su historia, las derrotas se observan en muchos ámbitos, desde la pérdida de la mitad de nuestro territorio en una invasión extranjera, diversas pérdidas en discusiones diplomáticas en los mercados comerciales, se considera que figuramos en los últimos lugares en las pruebas internacionales en los niveles de educación y somos el país con un elevado nivel de pobreza extrema que se ha tenido durante los últimos años. 

Hablando de fútbol la cuota de derrotas es considerable si mencionamos el récord observado en las competencias Mundiales, nuestro país acumula en los diversos encuentros sostenidos 24 derrotas más la sufrida recientemente ante el equipo holandés. Y el récord de que dispone durante su trayectoria en encuentros internacionales, es de 12 victorias, 13 empates y 24 derrotas, con un total de 52 goles a favor y 89 en contra. Con este récord, su participación no ha sido nada destacada.

Y como lo mencioné en mi blog anterior, la magia actuó para haber perdido el juego ante los holandeses durante los últimos cinco minutos y después vino el cáos. Lo cierto es que todos pudimos ver el cambio de la mentalidad de los muchachos mexicanos que durante todo el juego humillaron a los holandeses que por momentos estaban desconcertados y no sabían la forma de sobreponerse al equipo mexicano, acabándose aquel tradicional mito de los ratoncitos verdes que por fortuna ya no existe y a muchos nos cambió el panorama sobre el concepto que teníamos del equipo tricolor.

A esto debemos agregar que a su regreso de Brasil, traen consigo dos victorias y un empate ante el equipo favorito que es el anfitrión del evento con cuya trayectoria es probable que sea considerado dentro de los quince primeros lugares en la clasificación general, lo cual no es muy meritorio,  pero sí se observa el avance en su clasificación de los campeonatos mundiales anteriores. No debemos descartar que la Sub-17 ha obtenido notables triunfos en los años 2005 y 2011 así como la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres. 

Las inconformidades siempre son manifiestas y como las opiniones siempre son muy diversas, debemos aceptar las cosas como son y como siempre sacar lo bueno de lo malo. Es importante mencionar que este resultado sirva solamente como una lección que se debe continuar y me referiré ahora a la persona que originó esta polémica que es Miguel Herrera “el Piojo”, quien rescató al equipo mexicano de la eliminación y lo supo incorporar a la competencia mundial. El piojo Herrera debe continuar al frente del equipo mexicano, estudiar sus errores y seguir preparando a los jugadores como buenos elementos que demostraron con hechos representar al equipo.

Sabemos que por naturaleza pocas veces vemos hacia el futuro y con su buena vibra, debe seguir entrenando al equipo para enmendar errores y dentro de cuatro años representar un mejor papel como lo hacen ahora los cuatro equipos latino americanos que son: Colombia, Costa Rica, Argentina y Brasil. Sabemos que pocas veces nos gusta planear a futuro, pero como en todos los casos es necesario hacerlo para tener la suficiente fortaleza y técnica, ya que son poseedores de un espíritu suficiente que demostraron en el campo ante poderosos equipos cuya actuación es reconocida por todo el mundo.  

martes, 1 de julio de 2014

DERROTA O DIGNIDAD...

El domingo anterior fue un día que millones de mexicanos nos sumamos a una causa: que el tricolor ganara el juego de fútbol. El resultado final resultó adverso porque en los cinco últimos minutos del encuentro cambió el panorama y el equipo tricolor perdió el juego habiendo sido descalificado de la contienda. De inmediato vino el descontento de la gente y hubo toda clase de rumores, quejas y sentimientos equivalentes al desánimo que reinó en los mexicanos, desapareciendo de inmediato la euforia mostrada en los tres encuentros anteriores.

Yo no pude imaginarme la clase de magia que nos invadió al hacernos pensar una derrota de un equipo de fútbol que participó en un juego, y fue solamente eso… un juego. Considero que una derrota no nos puede hacer decaer el ánimo como parecía ser la expresión general y manifiesta que se escuchaba en varios lados y según los medios de comunicación en varias ciudades del país. A pesar de ese descontento yo escuché expresiones de que el equipo mexicano había jugado muy bien y durante todo el encuentro, desconcertó al equipo contrario que no pudo hacer un buen juego, a pesar de haber sido los sub campeones de la contienda en el campeonato anterior.

Nunca escuché opiniones de los  …ratones verdes que fueran famosos en pasados campeonatos cuando los nuestros creían jugar muy bien y cuando acudían a esas competencias mundiales, habían sido los primeros en descalificarse. O bien esa trillada frase que dice “se jugó como nunca y se perdió como siempre”, dejando un claro sentido de insensibilidad de no tener el menor conocimiento de este evento.

Haber sido derrotados en esta lid, nos debe dejar convencidos del lucimiento que hicieron los muchachos y del lucimiento de la camiseta que portaron con dignidad y la supieron defender durante todo el juego y  que al haber sido derrotados por un marcador equivalente a 2 – 1, se considera que hay valores más importantes como quedó demostrado, que ganar un simple juego ante un enemigo muy poderoso al que en ningún momento evadieron, sino siempre le supieron enfrentar con estrategia y valor, habiendo llegado a un marcador digno del que debemos ver las cosas buenas que nos deben dejar un conocimiento sólido, como lo fue la entrega y la decisión que su entrenador supo inyectarles con mucho ánimo cambiándoles la mentalidad desde el momento en que formó un equipo de gente decidida, que estaba dispuesta a ser triunfadora.

Si verdaderamente nos unimos desde un principio a un equipo ganador, debemos tomar las cosas buenas y no solamente ver las malas y si nos aficionamos tanto al equipo tricolor desde que inició su competencia, debemos continuar con ese ánimo de triunfadores, de hacer las cosas bien en nuestra familia, en nuestro trabajo, en todas las actuaciones en que tengamos participación directa, ya que nosotros sí podemos conseguir cosas mejores que nos engrandezca a todos y si demostramos el ánimo que tuvieron los muchachos en la cancha, nosotros podemos conseguir cosas mejores para nosotros mismos y para nuestro país.

Podemos hacer de México un pueblo campeón que no se amilana ante nada y continuar con el ánimo de triunfadores porque nuestro pueblo dispone de materia prima suficiente para hacer bien las cosas y conseguir mejores objetivos que mucha falta nos hace a todos. Eliminemos el engaño, la violencia que no nos conduce a nada bueno, porque lo único que nos deja es tristeza y frustración.


Aprovechemos ahora a la juventud que no se amilana ante nada y que lucha cuerpo a cuerpo con todo que se le ponga enfrente y no estemos esperanzados solamente a lo que las autoridades puedan hacer por nosotros. Un simple marcador de 2 – 1 no nos va a derrotar y mucho menos hacernos cambiar de opinión o sentir tristeza de un evento deportivo. Todos queremos el triunfo para nosotros y nuestras familias, pero debemos poner mucha entrega de nuestra parte para hacer bien las cosas, eliminado cualquier actitud negativa que pueda dar cabida a la trampa y al engaño.