jueves, 10 de enero de 2013

INICIAMOS EL AÑO 2013


Las fechas de inicio de año se prestan para que mucha gente haga planes de mejora en diversas actividades, pueden ser de: comportamiento, disciplina, enmienda, mejora y otros rangos que están enfocados a superarse en diversas  especialidades. Yo que acudo a un gimnasio observo que la asistencia inicial de socios, supera en número al resto del año anterior, cuando ingresa gente nueva con el propósito de hacer ejercicio. Es notorio que a partir de febrero, empieza a decrecer la asistencia hasta normalizarse en el mes de mayo próximo, cuando la membresía normal se regulariza con los socios de costumbre.

Así ocurre en muchas disciplinas que se inician con buenos deseos y a medio camino desisten de continuar el programa de alguna actividad. Estos propósitos son buenos cuando se trata de normas de conducta para la conservación o mejora de la salud. Todos tenemos la capacidad de sentirnos bien y de vivir contentos, demostrando interés para alcanzar esas metas y lo que falta es asumir plenamente la responsabilidad de nuestra propia vida y ocuparnos en la tarea de cuidar de nosotros mismos y querernos un poco para no desistir.

Para la conservación de la salud, debemos tomar en cuenta el entorno que nos rodea, sobre todo ahora en que el mundo está muy globalizado, las preocupaciones del mundo actual, lleno de tensiones y apremios. Todo lo que hace falta es asumir plenamente la responsabilidad de nuestra propia vida y ocuparnos de la tarea de cuidar de nosotros mismos. Valiéndonos de recursos suficientes para disfrutar plenamente de la vida, libre de preocupaciones que pueden afectar nuestra salud, para lograrlo es necesario valernos de muchos recursos para fortalecer nuestros sentimientos y deseos, sin olvidar la alimentación ni la práctica de ejercicio físico como parte importante de nuestro bienestar.

En muchas ocasiones por la frecuencia de crisis económicas y de valores que pueden afectar a todos en general, seguimos viviendo con prohibiciones que fueron efectivas en nuestra niñez, pero que de ninguna manera son aceptables en la edad adulta.

Nuestra vida transcurre tan rápido que participamos en actividades en forma rutinaria sin darnos cuenta de los detalles, ¿Cuántas veces has tocado un objeto sin sentirlo plenamente? ¿O comido un platillo sin degustarlo debidamente? ¿O inhalado alguna fragancia sin captar ningún aroma? Nuestros sentidos están adormecidos para evitar distractores en las tareas que tenemos encomendadas.

Se hace necesario frotarnos suavemente las sienes con las yemas de los dedos, procurando determinar los puntos de masaje para conseguir el mayor relajamiento posible. De otra manera los acontecimientos  pasan desapercibidos y nunca podremos encontrar el gusto por las cosas, aun disponiendo de ellas.

He aprendido a percibir más los objetos que tengo a la mano, es algo singular y maravilloso, así sea una flor, una artesanía, el dibujo de un niño, cada vez descubro los detalles que me parecen más agradables, aunque tal vez no sea la gente la que ha cambiado, sino el cambio ha operado en mí, lo cual me satisface y agrada confirmar.

Es importante considerar en esta época de cambios y de inflaciones y otras novedades no previstas, ni siquiera la gente adinerada puede darse lujos caprichosos, lo que nos demuestra que no hace falta ser millonario para disfrutar plenamente de la vida para ser feliz.

Cuántas veces hemos sentido el deseo de regalar a un amigo algo que sabemos que él apreciará, pero no lo hacemos por diversas causas; otras veces, nosotros mismos nos privamos de darnos un pequeño gusto porque no lo consideramos necesario en ese momento, aunque después sentimos mucho no haberlo adquirido. Nos privamos a nosotros mismos o a los demás de algún momento que pudo haber sido de mucho agrado y satisfacción.

Es importante recordar que mucha gente considera que la vida es algo a lo que tiene derecho, en ese sentido debemos considerar la vida como un privilegio y por esa razón nosotros somos privilegiados para disfrutar lo que poseemos y los momentos gratos que tenemos. Al poseer salud, familia, amigos y tantas otras cosas agradables, debemos considerar que obtenemos momentos que nos proporcionan felicidad y son los satisfactores que nos proporcionan una vida plena. Así lo deseo muy cordialmente para todos los lectores de este blog y que el año sea pleno de dicha y felicidad y todos los proyectos hay que ejecutarlos.
¡SALUD Y FELICIDAD.-larga vida!

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