QUÉ GRADO DE PACIENCIA TIENES.

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He notado que la gente en las grandes ciudades es muy impaciente, al menos el día de hoy lo comprobé en esta ciudad al conducir mi automóvil y estar esperando en una calle angosta, la maniobra de un pesado camión enfrente a mí y esperar su movimiento de carga por un momento; ocurrió que la persona que manejaba su camioneta atrás de mí, se pegó en tal forma al claxon que además de ser ensordecedor, noté que no tenía ningún grado de paciencia, hasta que el pesado camión delante de mí inició su marcha y despejó el camino para darnos el paso.

Con facilidad las personas pierden la paciencia; y, la paciencia es una de las cualidades que más pueden proporcionarte una personalidad que puede ser plácida y afectuosa, porque cuando eres más paciente te resultará más fácil siempre aceptar las cosas como puedan llegar a presentarse, en lugar de insistir en que todo tiene que hacerse como a ti te gustaría hacer todo, porque sin paciencia la vida puede resultarte demasiado complicada por estar siempre de mal humor y te hace sentir molesto e irritado en perjuicio de tu propia salud.

Caso contrario, cuando tu comportamiento es con suficiente paciencia para las cosas que desempeñas, te facilita la vida haciéndola más cómoda y tranquila y además de demostrar buen humor, es necesaria para que puedas tener paz interior. Hacerte paciente te representa abrir el corazón en todo momento, aun cuando no te guste lo que está sucediendo y puede ser el caso de un embotellamiento o atasco de tránsito, y los incidentes te obligan a llegar tarde a una cita o a  tu empleo. Puedes conseguir abrirte a una reflexión y te evitará detener el momento de molestia; y, puedes formar un proceso mental favorable, antes de que tu pensamiento se te escape con una fuerte reacción, y recordarte que debes actuar con amabilidad y relajarte.

También puedes utilizar el recurso de inhalar y exhalar fuerte para oxigenarte, dándote la oportunidad de recordarte a ti mismo dentro de tu esquema mental, que llegar tarde puede representarte una pequeñez, siempre y cuando tengas la oportunidad de salir a buena hora para tu compromiso. Considera que ser paciente te ayudará a conocer la deferencia que existe en otras personas, o el trato que puedan tener contigo, ya sean tus propios familiares, tus amigos o tus compañeros de trabajo.

Cuando veo el comportamiento de otras personas, me surge de inmediato un sentimiento de paciencia que me hace vivir el momento presente y cualquier alteración que pueda estarse formando dentro de mí, queda eliminada y me recuerda de inmediato que tengo la oportunidad de estar alternando esos momentos con otras personas.

He podido darme cuenta que si observas con más detenimiento, puedes darte cuenta del comportamiento y las reacciones de otras personas, así como conocer sus actuaciones que pueden ser totalmente frustrantes. Si tu llegas a conseguir este comportamiento, puedes convertirte en una persona más paciente y plácida y lo más importante puede ser que empieces a darte cuenta que comienzas a disfrutar de muchos momentos que antes podrían resultante frustrantes, pero con esta actuación, comienzas a disfrutarlos plenamente.