martes, 20 de mayo de 2014

UN OBJETIVO COMO FORMA DE VIDA.

CONSIGUIÓ SU OBJETIVO.
Recuerdo que durante mi trayecto en diversos servicios profesionales otorgados a terceros, conocí mucha gente con deseos de progreso y superación, ascendían a niveles de trabajo que no podían superar por razones externas que no les permitían mejorar su situación económica y por esa razón permanecían anclados en sus empleos por muchos años, sin poder conseguir ascensos por falta de decisión y cuando les pregunté el motivo de no hacerlo escuchaba respuestas similares de: “es fácil fantasear, pero la realidad me obliga a ganar dinero para pagar mis facturas.” Todos estos sentimientos y muchos parecidos son sólo excusas para estar inmovilizado en el lugar en que ha decidido permanecer y así habían transcurrido varios años. Aquí vale la pena citar un diálogo de la película Elsa y Fred”, donde Fred responde a una pregunta de su sitio de trabajo, y dice solo trabajé en la Telefónica Española hasta jubilarme”  Y Elsa le comenta: “¿Y aguantaste 40 años encerrado en un reducido cuarto de oficina?” Lo que le representó a Fred toda su vida activa.

La parte triste de estas reflexiones, es que muchas personas se niegan rotundamente a dar los pasos que les llevarían a cumplir sus propios sentimientos de misión y objetivo. Utilizan los mismos pretextos manidos y viejos que utilizan muchas veces en todo y lo cierto es que no quieren correr riesgos. “Tengo miedo a fracasar”  “¿Y mis responsabilidades familiares?” “No puedo cambiar de vida”. Estos sentimientos y otros muy parecidos, se refieren a excusas para permanecer inmovilizado en un cargo donde ya dispone de un “círculo de comodidad” en que ha decidido permanecer para siempre.

La sensación de tener un objetivo se logra ignorando esos tipos de excusas externas, prometiendo convertirse en la persona que quiere cambiar. El pago de las facturas, las responsabilidades familiares, mi forma de vida y otras tantas otras emociones sólo se resolverán si tú mismo te das permiso para tener en la vida, una sensación de propósito de mejora. Esta  persona tiene la opción de elegir ser un individuo satisfecho y responsable, cubrir todas sus obligaciones de elección personal, si está dispuesta a eliminar esos temores. De no ser así, este tipo de personas, acabarán justamente con aquello que están defendiendo, disponiendo de una vida que llevan, para cumplir obligaciones impuestas, pero sin gozar de “paz interior” alguna.

Yo creo que no hay nada tan importante como tener un objetivo respecto a uno mismo como ser humano, si quieres mantenerte sano y creativamente vivo, no puedes ceder en ello.


Tener alguna sensación de objetivo en la vida es algo de suma importancia y no hay nada que sea más decisivo para tu supervivencia y estabilidad emotiva, porque cuando desaparece esa sensación de “objetivo en la vida”, la persona se hace propensa a la depresión y enfermedades tensionales. De estos casos, yo creo que todos conocemos casos y personas que son muy patentes de personas que nunca cambian y que nos dan una idea de lo delicado que representa que esas personas se van por el camino más fácil y con ello demuestran que nunca podrán cumplir sus objetivos.      

No hay comentarios:

Publicar un comentario