El
insomnio debe ser tratado con mucho cuidado por las diferentes formas en que se
origina, como es el caso de estar muy estresado por cuestiones de trabajo o por
múltiples inconvenientes que se presentan con frecuencia y el desvelo puede
manifestarse temporalmente; o bien amerita un insomnio crónico que deba ser
tratado por un especialista que se dedique a atender con mayor intensidad la
causa que provoca el insomnio.
Los
insomnes no solamente son los que no pueden dormir, sino aquellas personas que
tardan demasiado en poder conciliar el sueño y despiertan muy temprano y no
pueden volverse a dormir y los que despiertan muchas veces por la noche y se
quedan despiertos pensando una infinidad de cosas que no llegan a ocurrir, pero
mientras tanto causan mucha inquietud.
Los
especialistas en estudiar el sueño de aquellos que dicen que no pegan el ojo durante toda la noche, han
detectado que los pacientes duermen a menudo mucho más tiempo que otras
personas y que su descanso es suficiente. Dan más importancia al poco tiempo
que duermen y aquellas personas que disponen de un sueño normal, son los que
proporcionan mejor información de sus horas de sueño.
Los
especialistas que investigan sobre el insomnio y mucho saben de esto, hacen las
recomendaciones que se citan en seguida:
Detectar con precisión la causa.- Conocer la causa, es la base de la curación sin el
uso de medicamentos. Algunas de las causas del insomnio son sicológicas, otras
pueden ser por el cambio biológico. En estos casos es muy fácil para los
médicos atender estos enfermos de insomnio al que le prescriben píldoras para
dormir, sin informarse que el paciente está pasando por algún problema que le
quita el sueño. En esos casos los consejos y no los sedantes pueden ser el
mejor procedimiento para tratar el insomnio.
Hacer mucho ejercicio.- Hacer ejercicio viene a ser la forma más sencilla de
atender el insomnio y resulta ser la receta más acertada. Si los desvelados se
levantaran media hora antes y practicaran la caminata; o bien siguieran la
fórmula de caminar durante el día una hora con paso fuerte, dispondrían de un
sueño más reparador.
Seguir las rutinas de acostarse a la
misma hora y en la misma posición.- Puede
parecer una rutina tonta pero hacerlo con uniformidad induce al sueño. Los
alimentos con carbohidratos parecen ser perjudiciales, lo mejor resulta
favorable consumir proteínas. Se puede tomar leche que parece ser la que
dispone de un efecto soporífero en algunas personas. Así mismo es recomendable
un baño de agua tibia antes de acostarse para conciliar el sueño.
Hacer uso del sentido común y del buen
ánimo.- Los especialistas en sueño hacen la propuesta de no
permanecer acostado y permitir la tortura del insomnio. Es preferible dedicar
ese tiempo para leer, recortar figuras, pegar fotos en algún álbum, en lugar de
estar dando vueltas en la cama y pensando cosas irresolubles. Se debe ocupar
ese tiempo en hacer alguna tarea, la que sea de mayor utilidad.
Debe
tomarse en cuenta que la mayoría de la gente llega a casa por la tarde-noche
con algún grado de tensión, estrés y ansiedad muy elevados, necesita descansar,
relajarse y desconectarse de todo; pero en vez de descansar un poco termina ese
trabajo pendiente de la oficina, después de la cena mira un poco la televisión,
lee su correo electrónico, si es posible chatea un rato y transcurre el tiempo,
hasta que por fin agotado decide irse a la cama. Al día siguiente entiende que
durmió poco y mal, se encuentra cansado y la respuesta es muy clara, todo lo
que hizo, lo sacó del tiempo que debió destinar al sueño, olvidando la
importancia que tiene dormir lo suficiente para recuperar su organismo.
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