A
nuestro país se le atribuye el primer lugar en obesidad, debido a que ha
aumentado mucho y últimamente el número de personas gordas en nuestro país,
hasta se mencionan estados de la república donde se ha observado este
crecimiento como es el caso de Yucatán que se debe a su exquisitez de su
comida. Calumniado e incomprendido este humilde tubérculo es en realidad uno de
los vegetales más importante en el mundo.
Colocamos
a la papa en uno de los alimentos engordadores y lo cierto es que su contenido
es rico en almidón, grasas, carbohidratos y escaso en proteínas y vitaminas. Lo
cierto es que debíamos consumir once kilos de papas para que nosotros
pudiéramos aumentar un solo kilo. Depende mucho de su preparación en la cocina,
por ejemplo la papa cocida de tamaño mediano no produce más calorías que la
manzana, considerada tan saludable y menos que el requesón o el aguacate. En
cambio las papas fritas que son consideradas como chatarra aumentan el mito de
la obesidad, pero son rebanadas fritas en grasa y le agregan sal.
Por
la información de que disponemos la papa fue cultivada por los incas en Perú
200 años antes de Cristo y descubierta por los españoles en 1537 en la aldea
andina de Socorota. En sus orígenes se utilizó para fines medicinales, ponían
rebanadas crudas sobre huesos fracturados y aplicaciones en la cabeza para
evitar dolores y molestias. Sabían preservarla indefinidamente y utilizaban ese
procedimiento para quitarle la humedad, dejándola dura pero muy ligera de peso,
se consideró como el primer alimento desecado por congelación que hubo en el
mundo. Papa era el nombre genérico
que le dieron a esta planta de la que conocían más de cincuenta y dos
variedades.
Fue
introducida en Europa desde hace unos cuatrocientos años, colgándole una serie
de mitos y calumnias por su desconocimiento y uso porque fue considerada como
inadecuada para el consumo humano porque no nace de semilla alguna y se dijo
que podía ser un desacierto utilizarla para el consumo humano porque podría ser
causante de diferentes enfermedades. Transcurrieron por lo menos unos
doscientos años para que la papa
fuera aceptada desde sus primeros envíos de Sudamérica, hasta que finalmente
fue aceptada para su debido cultivo y aceptación en Europa.
Los
españoles habiendo sido los introductores de la papa en Europa, fue utilizada hasta muchos años después y la
compararon con la turma de tierra, una especie de trufa o de hongo carnoso y la
consideraron feculenta y de buen sabor y llenan de papas una espectacular tortilla, considerándola como un plato
delicado para su consumo.
Los
franceses llaman a la papa con el
nombre de ponme de terre (manzana de tierra).
Es un lugar donde tuvo mucha aceptación, ya que se conocen más de cien recetas
que ya son clásicas en su consumo como es el caso de las muy gustadas pommes de terre soufflées por su
presentación, ya que se inflan convertidas en doradas bolas huecas, hasta las
exquisitas pommes Anna, en
presentación en rebanadas muy finas, asadas en mantequilla dulce y presentadas
como pastel… mmm, ricas.
En
Alemania la llaman de dos maneras, Kartoffel
o trufa y Erdapfel o manzana de
tierra y la utilizan para hacer: macarrones, tortas, pastelitos y pan. Con suficiente iniciativa mezclan el
puré de papa con salsa de manzanas, azúcar y vinagre, la utilizan para rellenar
gansos y cocinan una fabulosa ensalada de papa caliente.
Las
formas en que se prepara la papa en
el mundo abarca una cantidad enorme de recetas de cocina, pero se debe tomar en
cuenta que los peruanos fueron los primeros productores y quizá dispone de
mayor imaginación de usos, han inventado la famosa Causa a la Limeña que es el puré de papa mezclado con jugo de
limón, aceite de oliva, cebolla picada, sal, pimienta y chile o ají. Esperemos
que pronto este vegetal peruano, salga de su país, para ser utilizado para
acabar con el hambre que impera actualmente en el mundo.