lunes, 19 de noviembre de 2012

¿PIENSAS VIVIR UNA LARGA VIDA?


Disfrutando la Longevidad.
Si es así, qué bueno que ese sea tu proyecto, en el siglo XX, el promedio de vida de los mexicanos era de 35 a 40 años y ahora cien años después la esperanza máxima de vida se calcula en 73 años para hombres y 78 para las mujeres; y es que actualmente con el avance de la tecnología, la medicina y la nutrición, se augura por estudiosos en materia de longevidad, que en nuestro país, podemos prolongar la vida hasta llegar a cien a años de edad.

Este tipo de noticias es muy grato recibirlas, y aunque en el lenguaje resultan positivas, la realidad es distinta si empezamos a contemplar todo lo que trae aparejada esta idea para llegar a feliz término. En principio los cuidados que debe observar la persona interesada durante su vida activa, requiere mucho cuidado y atención para llegar a una edad longeva.

Después de los cuidados requeridos para rebasar los pequeños dolores que aparecen en la vida normal, son síntoma de alguna lesión y debe ser atendida con atención de médicos especialistas, para evitar achaques y complicaciones imprevistas, que dañen en alguna forma la salud que es muy necesaria para conservar la calidad de vida.

Después de cubrir esa etapa de calidad, debe haberse trazado un plan de vida personal, para llegar a la tercera edad con una cultura de envejecimiento que permita en su momento practicar alguna actividad profesional, así como disponer de un plan de ahorro  manejado desde sus años activos hasta conseguir una jubilación suficiente a cubrir el tiempo que su cuerpo y su salud le permitan vivir, calculando los  años por venir, y cuidando la integración de su vida familiar, para disfrutar de una subsistencia que maneje con tranquilidad.

Es muy posible si su vida longeva llegue a los setenta y cinco años con buena salud que le permita vivir con plenitud, con ese ritmo pueda prolongar quince años más, o sea llegar a los noventa con una observancia constante de prevención de padecimientos de todas clases, cuidando mucho aquellas enfermedades incurables,  de las que aun no se dispone de alguna fórmula activa para combatirlas, como pueden ser el cáncer, el mal de parkinson y la misma diabetes que es causa bajas considerables cada año en nuestro país.

Desde luego que esta longevidad alcanzada, debe cubrir su etapa con algunas nuevas rutinas que permitan estar activa a la persona con vida más larga. En estos nuevos tiempos es muy posible que la gente se decida por estudiar una segunda carrera profesional, y tal vez emprender nuevos negocios o practicar algún deporte y conseguir un mantenimiento en su salud, iniciar el conocimiento de un nuevo idioma; o bien, ingresar en el mundo actual de la computación, para actualizar conocimientos que antes no había necesitado pero que ahora resultan imprescindibles para continuar activo.

Ante el crecimiento de población ya no hay tiempo de considerar a los ancianos como personas respetables, sino que ante su desarrollo han sido calificados como un problema social y la importancia de un futuro financiero se agrava en la medida de que los años para vivir se alargan y como consecuencia surgen problemas de convivencia con sus familiares cercanos, así como también sus necesidades físicas.

La situación actual se ha agravado debido a la desocupación y el desempleo que ha obligado a los jóvenes a emigrar al extranjero para buscar una nueva vida, con muchas posibilidades de no regresar a sus lugares de origen, habiendo pueblos enteros formados de gente mayor.

Estos razonamientos deben ser considerados por los jóvenes que actualmente están formándose para realizar una vida completa que les permita contemplar otra clase de problemas que en su oportunidad deban resolver. Para hacer frente a los retos que se les lleguen a presentar, deben cubrir los requisitos mínimos de enseñanza y de preferencia terminar una carrera profesional que le permita un desempeño adecuado ante las oportunidades cuando lleguen, y para ello  de ser posible capacitarse en alguna especialidad que le resulte necesaria; o bien, continuar sus estudios de maestría y de preferencia cursar un doctorado que mucho les ayudará en sus deseos de vivir y seguir activos ante nuevas oportunidades y con su actuación, encontrarle sentido a la búsqueda de la longevidad.

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