Ansiedad |
Hoy
por la mañana tuve oportunidad de ir al centro de la Ciudad de México después
de no haberlo hecho en día laborable durante varios años, pude observar muchas
caras tensas al presentarse ante la realidad cotidiana, con tensión y angustia
que les hacía estar alertas ante el exceso de gente, de automóviles y algunas
personas mostraban urgencia de llegar a algún lugar o simplemente desarrollar
rutinas amenazantes donde persiguen algo de ganar o perder.
Muchas
personas podían estar envueltas en conflictos vitales, económicos, laborales o
perseguían cerrar algún negocio con la posible incertidumbre de no conseguirlo.
Habría tal vez algunos problemas de frustración por algún posible divorcio, el
sentimiento de la muerte de algún ser querido o un posible desempleo. Esas
situaciones no obligan a sufrir un trastorno de ansiedad, todo dependerá de
disponer de capacidad suficiente para resolver su problema.
De
acuerdo con cifras puntuales de la Organización Mundial de la Salud, (OMS) 264
millones de personas en el planeta sufren de ansiedad patológica, problema
mental que afecta a 7.7 % de mujeres mexicanas y 3.6 de los mexicanos.
En varios
casos, puede ser un trastorno de ansiedad generalizada que se caracteriza por
angustia persistente durante más de 6 meses continuos provocada por multitud de
situaciones. Agotamiento, dificultad para concentrarse, tensión muscular, dolor
de cabeza, molestias intestinales, mareos y temblores, son síntomas que están
relacionados entre sí.
Los
trastornos de ansiedad pueden presentarse en crisis de pánico o angustia,
porque en tres de cada cuatro asuntos, se presenta ante casos de espacios
abiertos como la persona que lo padece apenas salga de casa. Son personas que
sin previo aviso experimentan terror a la vivencia de muerte inminente, cuando
este peligro no es real.
Lo
más recomendable en estos temas para ayudar a salir de lidiar con la ansiedad, según
los expertos que saben muy bien de estas molestias recomiendan el asesoramiento de un terapeuta,
aunque también sugieren:
Dominar tus miedos.-
Pon en perspectiva aquello que te está provocando ansiedad.
Cambiar tus patrones
de respiración.-Procura hacer un poco de ejercicio para acelerar la
respiración.
Evitar pláticas
relacionadas con temas negativos.- Cambiar de plática en los casos que te
produzcan ansiedad y no discutir sobre temas difíciles que no está en tus manos
resolver.
Tomar unas
vacaciones.- Pueden ser períodos cortos para cambiar la manera de actitud.
La
ansiedad es la sexta causa de discapacidad laboral en el mundo, afecta a todos,
aunque se considera que los perfeccionistas son los más vulnerables. Si estás
entre ellos o sueles tener problemas para dormir, estás de malas o con muchos
nervios, eres víctima de este mal, pero no te angusties no serás víctima de un
mal cardiovascular.
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