Tradiciones Mexicanas. |
Nuestros
usos y costumbres son muy apreciados en el extranjero y lo he comprobado en
diferentes viajes realizados en Japón, Europa Estados Unidos, y sobre todo
países Latinos, donde los grupos de mariachis son muy apreciados, los bailables
derivados del folklor, los grupos jarochos, los tríos románticos y tantas otras
cosas que sería largo enumerar.
Es
de considerar con 120 millones de habitantes en nuestro país, de los cuales 30
millones que viven fuera de México, principalmente en Estados Unidos que es el
lugar donde frecuentemente se van nuestros paisanos se observa el fenómeno de
la “diáspora mexicana”. De esos 30
millones, de gentes que viven fuera de nuestro país, la mayoría de ellos se han
ido a Estados Unidos.
La
diáspora empezó con la dispersión del pueblo judío por diversos lugares del
mundo después de la destrucción del reino de Israel. (Siglo VI A. C.) Nuestros
compatriotas han tenido un desempeño tal, que la migración mexicana hacia el
vecino país del norte, conforma un mercado laboral propicio para las
comunidades mexicanas.
Este
grupo de mexicanos en los Estados Unidos, con sus envíos a nuestro país,
representa uno de los sustentos económicos de la economía nacional. Esas remesas de nuestros compatriotas
representan un ingreso de más de 25 mil millones de dólares anuales que son
importantes para nuestra economía.
Valdría
la pena que el gobierno mexicano iniciara una
política de estado para concentrar la fuerza de estos trabajadores
expatriados que no pudo retener, con el fin de hermanar con un conocimiento de
nuestro país, a los mexicanos de ambos países.
Esto
resultaría fabuloso, si México auspiciara que muchos mexicanos y otros tantos
mexicano-norteamericanos viajaran a conocer la tierra de sus antepasados que
representan las raíces de esas familias. Conocerían las bellezas naturales y
reconocerían tantas cosas que para nosotros son importantes como es el caso de visitar
a las familias, probarían la comida regional y de paso se enchilarían por primera
vez, se maravillarían de nuestras
fiestas tradicionales y sentirían la calidez de dar un abrazo a un ser querido
y tantas otras cosas que para nosotros son normales y por ser pequeños detalles
en ocasiones de rutina, representan momentos que nos hacen felices y
disfrutamos ampliamente.
Lo
importante sería que conocieran más de cerca las costumbres de nuestro país,
nuestras tradiciones, nuestra religión y si quieren regresar a su país
adoptivo, lo hagan con un sentimiento más completo que les produjera el orgullo
que nosotros experimentamos al encontrarnos visitando cualquier lugar en el
extranjero y sobre todo cuando venimos de regreso de algún viaje, sentir la
felicidad de llegar a nuestra casa con nuestros familiares, con nuestros
parientes y nuestras amistades donde verdaderamente sentimos la satisfacción de
ser importantes.
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