PIÑATAS, ARBOLITOS Y TRADICIONES.

PIÑATAS MEXICANAS.

En los últimos días del año y sin darnos cuenta, nuestro humor empieza a cambiar, para algunos bien, tal vez para otros mal, pero si nos inclinamos por lo bueno, será preferible y empezaremos a gozar las fiestas navideñas, donde la mayoría de la gente comparte, participa y colabora. Las fechas son agradables por que se dan y se reciben abrazos, se desean buenos augurios y sobre todo, la gente se felicita entre sí.

Se ha hecho costumbre cuando acudimos a algún restaurant, vemos grupos de diez, quince o más personas, en alegres reuniones compartiendo el pan y la sal de los alimentos, y en su mayoría, con pequeños paquetes que suelen ser regalos con envolturas de brillantes colores y con motivos navideños. Es costumbre hacer intercambio de regalos y la gente comparte momentos de alegría, después de un largo año de trabajo, de amistad, de compañerismo o simplemente por el hecho de reunirse para compartir momentos agradables.

Así mismo, son épocas de posadas que con el mismo afán de compartir, se reúnen: en iglesias, en familias, los compañeros de trabajo, en grupos de amigos o  para celebrar fechas decembrinas, las personas se reúnen en cenas, bailes y fiestas de posadas.

En esas fiestas no faltan las tradicionales piñatas que con toda seguridad, todos conocemos porque alguna vez hemos participado como protagonistas para romperlas; o bien, por lo menos hemos visto a otras personas que las quiebran para recoger los regalos de fruta, dulces y juguetes que caen al suelo para complacencia de los asistentes.

Hablando de piñatas es una tradición muy mexicana, sin precisarse con claridad sus inicios, se menciona que es de origen chino o de inicio italiano y  algún dato más creíble se conoció en México en la conquista de los españoles como parte de la religión católica para festejar cada primer domingo de cuaresma, celebraban “domingo de piñata”.

Así mismo se conoce en su forma tradicional de estrella de siete picos y cada uno de ellos representa un pecado capital; así al golpear la piñata se considera como ceremonia simbólica donde el hombre elimina sus pecados. El palo o garrote representa la fuerza de la virtud para hacer frente a las tentaciones mundanas y al vendar los ojos de quien deba golpearla, esta costumbre, se refiere a la fe ciega con que se enfrenta a la maldad y se apalea para desterrarla.

Lo cierto es que México conserva estas tradiciones que son parte de nuestras raíces ya que además acostumbrarlas en las fiestas navideñas y en sus posadas, las piñatas se utilizan para las celebraciones de fiestas infantiles y hasta en fiestas de adultos en cualquier época del año. Originalmente se utilizaban ollas de barro forradas con varias capas de papel y pegadura para darle un poco más de resistencia y se rellenaban de fruta y dulces. Actualmente ya se producen de cartón y se les da forma de diferentes objetos o de personas y en algunos estados del país, las producen de varillas de carrizo, forradas con papel celofán o plástico de colores y las rellenan de pequeños globos inflados que al caer producen una alegoría de colores.

En el caso de los arbolitos de navidad, es una costumbre extranjera ya que se popularizó en el norte de Europa habiéndose originado en Alemania para la celebración de fiestas populares durante el solsticio de invierno, que era cuando se gestaba la renovación de la vida.

En nuestro país durante el siglo XIX se inició el árbol navideño durante el breve reinado de Maximiliano y Carlota (1864-1867) y durante un el  tiempo que duró su mandato. Se revivió la costumbre hasta 1950; con su inicio tomó fuerza la costumbre, debido a la difusión que hizo la nación americana, por medio del cine y la televisión. Actualmente y en todas las ciudades grandes del país, se colocan grandes y vistosos árboles de navidad, no tanto por tradición sino por decoración como ocurre en todos los centros comerciales como fue el caso de Liverpool Insurgentes que inició la costumbre de colocarlo en una explanada frente a su tienda.

Como tradición en estas fechas navideñas, los capitalinos procuran salir a las playas y a las grandes ciudades del interior, donde el clima es benigno y los provincianos procuran visitar la ciudad de México, para visitar familiares, conocer la ciudad, recorrer los museos, centros comerciales y sus espectáculos que organizan en estas fechas navideñas. Es notorio el ambiente festivo y el buen humor de la gente en los centros de diversión como es el caso del zócalo de la ciudad, en la calle admirando el alumbrado. La gente con facilidad se desea felicidades, abundan los abrazos y reina la cordialidad y los buenos deseos de prosperidad para el año próximo.

Así mismo, las iglesias celebran sus ceremonias religiosas y el nacimiento del niño Jesús, así como las misas de Navidad el día 24 y las de fin de año el 31 de diciembre, para agradecer los beneficios recibidos durante el año, así como las peticiones y los mejores deseos para el próximo año que está por iniciarse, en donde una mayoría de fieles participan de acuerdo a viejas tradiciones que tienen su origen en nuestras raíces de antaño.

Y así iniciamos el año nuevo rodeado de nuestros familiares más cercanos, nuestros amigos estimados, en medio de una fiesta que puede ser una cena en casa, o en un restaurant, en medio de abrazos, besos, en medio de palabras de amor, y amistad, con muchos proyectos en mente y buenos deseos de mejorar nuestra conducta.

Mientras tanto y durante el año que está por terminar, esta publicación agradece a sus cuatro asiduos lectores (que ya cuenta con ellos), el mejor deseo de que puedan disfrutar estas fechas navideñas rodeados de sus familiares y personas queridas, así como la mejor dicha, salud y felicidad para el próximo 2013. Mientras tanto sigo la tradicional costumbre de disfrutar estas fechas, gozando de un breve descanso en estos días para reiniciar la próxima publicación el ocho de enero próximo. Mientras tanto un abrazo cordial y que el año próximo sea …”Con salud y Felicidad.-Larga Vida”

Agradezco a mis hijos Daniel, Rafael y Alexx, haberme iniciado en el conocimiento de la computación, haciendo posible estas publicaciones y más amigable mi actividad profesional.