jueves, 6 de diciembre de 2012

LA SOLEDAD EN DICIEMBRE.

La Soledad de Diciembre.

Ha llegado diciembre y con él empiezan a renacer los recuerdos de vivencias en años anteriores: para los jóvenes de la niñez, para los adultos de la juventud, para los adultos mayores se empieza a desarrollar una película mental de su madurez; y en todas las edades empiezan a renacer los recuerdos de años anteriores donde surgen evocaciones de: familiares que ya no están, de amores perdidos, de amistades pasadas y de tantos otros personajes importantes en sus vidas que les gustaría ver nuevamente, pero que ni idea tienen de ellos. Les han perdido la pista.

Muchas ocasiones estas fechas corresponden a melancolías que afectan nuestro ánimo y cuando han pasado muchos años. Sabemos que fueron tiempos felices que pasamos rodeados de familiares, parientes y amigos que no hemos visto en años y simplemente no sabemos nada de ellos.

El ritmo de vida actual que nos hace pensar en la rapidez en que transcurre el tiempo; cuando contando los días, los meses y sin darnos cuenta de la rapidez con que se vive, se arrancan las hojas del calendario y nos damos cuenta que hemos llegado al mes de diciembre donde se inicia la aflicción de mucha gente que lamentan la “soledad de fin de año” y conozco el decir de muchos  de ellos, ¡que no son simpatizantes de las fiestas decembrinas!

Lo cierto es que se sienten solos y muchos de ellos al sentir aislamiento, propician malestares que les hace sentirse tristes y muchos males que atormentan en lo espiritual a la humanidad en la vida moderna. La soledad no respeta edad, lugar ni condición. Es el caso de los adolescentes que como causa común en nuestros días, se sienten incomprendidos por sus padres y hasta aislados de ellos. 

Muchos matrimonios que por cercanía conozco algunos, se sienten extraños el uno al otro, aun cuando se encuentran viviendo en la mayor intimidad pero guardan su distancia y no se soportan mucho, viviendo episodios difíciles sobre todo cuando existen hijos de por medio que sin ninguna culpa, pueden llegar a ser los verdaderamente afectados.

Aún los casos más desgarradores puede ser el tema de los ancianos que con frecuencia viven una soledad cruel, al disponer de hijos y parientes cercanos pero se sienten inútiles e indeseados, terminando su vida abandonados en asilos. Sufren mucho cuando se encuentran enfermos y tristes en su soledad, sufriendo la nostalgia de las fechas decembrinas, al encontrarse marginados, solos y sin futuro. Jóvenes o viejos, ricos o pobres, en todas las fechas, la soledad les aprisiona y en la mayoría de las veces sin razón o motivo alguno.

Muchas veces tratamos de no vernos mezclados en esos dilemas y corremos afanosamente para evitar encontrarnos solos y prueba de ello es que nos asociamos en clubes, participamos en masa a estrafalarias competiciones deportivas, participamos en festividades aún sin conocer a mucha gente pero con el afán de hacer amigos y acudimos a funciones de teatros, conciertos y al final nos damos cuentas que de nada sirve todos esos movimientos, seguimos sintiéndonos solos.

En muchos casos la gente acostumbra acudir a psicólogos o siquiatras que les ayuden a resolver sus vidas, ya que ellos son incapaces de hacerlo, pero pueden pasar años en consulta y no obtienen ningún resultado positivo de ayuda. La mayoría de las veces, la respuesta está en nosotros mismos pero no nos atrevemos a tomar decisiones firmes que pueden resolver nuestro problema.

En ocasiones es necesario buscar algún móvil para distraer nuestra atención y conseguir alguna causa útil, con el propósito de servir a los demás, sobre todo en un momento tan fructífero como este mes de diciembre, para hacer felices a otras personas sin distinción de raza, edad o estado civil,  sino solamente buscando la manera de compartir con ellos, un poco de lo que tenemos y al hacerlo nos sentiremos satisfechos.

Si tu mismo, vives un momento de soledad, busca la manera de acudir a lugares donde hay niños que tienen necesidad de comprensión y amistad para compartirles tu tiempo escuchando sus problemas; también acudir a los asilos donde se encuentran abatidos, los ancianos que experimentan tristeza y sed de compañía, les puedes hacer felices escuchando sus problemas y muchas ocasiones solo desean que alguien les escuche porque se encuentren desamparados y privados de entretenimiento. Aunque sea solamente en estas fechas …¿Puedes salir de tu encierro a buscar la dulce satisfacción de hacer felices a los demás?  Ten la seguridad que es una grata curación para el alma.

 

 

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