Según
versión expresa del Papa Francisco cuando llegó a nuestro país y después de la
calurosa recepción de que fue objeto y al ser recibido por una calurosa
bienvenida por los jóvenes, les expresó: Son
ustedes la riqueza de esta tierra” y así lo expresó al Presidente de la
Nación en su primer saludo al llegar. Y aclaró, “No dije la esperanza de esta tierra: dije “Su riqueza”
El
Papa se refería a que todo el conjunto de jóvenes forman la riqueza del país,
pero esa riqueza debe transformarse en esperanza y la realidad es que todos
podemos vivir, pero no podemos vivir sin esperanza y para lograr eso, debemos
valorarnos, o sea que la esperanza nace cuando se puede experimentar que no todo
está perdido y para lograrlo es necesario hacer un ejercicio de empezar desde
nuestra casa con nuestra familia.
Y
acá es donde debe tenerse cuidado cuando en la familia o en tu entorno te hacen
sentir que eres muy poca cosa y no vales nada y esa situación es muy dolorosa,
ya que esa situación causa una angustia. Aunque también existe otra amenaza a
la esperanza, la de hacerte creer que tú eres valioso cuando te disfrazas y
utilizas ropas costosas de acuerdo a la moda vigente y confundes la importancia
por tener dinero y esos signos te hacen sentirte feliz y es difícil en esa
forma sentirte realizado. En el fondo de tu corazón, sabes que no eres digno de
cariño, digno de capacidades y esa realidad tu corazón la intuye.
Yo
recuerdo que en mis años de estudiante de la escuela primaria y en mi natal
Orizaba, se nos decía que “Ustedes son el
futuro de la Patria” y tal vez no entendíamos muy bien el porqué. Lo cierto
es que se nos decía del compromiso de prepararnos con suficientes conocimientos
adquiridos en la escuela para tener mejores herramientas y actuar mejor en
nuestro futuro, gozando con mejores oportunidades. Yo así lo consideré y
aproveché las oportunidades que tuve para continuar mis estudios.
Pero
también mucho cuidado jóvenes cuando en su juventud, se les usa como medio para
enriquecer a otros y solamente con fines mezquinos, utilizándolos con muchas
promesas que finalmente no son reales y en esas condiciones es difícil apreciar
debidamente la riqueza de la juventud, si solamente se les maneja como medio
para operaciones ilícitas y que representan un peligro para conservar su integridad
humana.
En
ustedes radica la decisión de dedicarse a realizar actividades lícitas; o bien,
dedicarse a ser simples mercenarios, realizando actividades de ambiciones
ajenas que solamente conducen a la destrucción y eso solamente depende de
ustedes que son los únicos que pueden realizar su vida y planear su futuro.
Consideren
que el arte de ascender no está en cuidarse solamente de no caer, sino en no
permanecer caído, al contrario, levantarse y seguir caminando: y si en su
camino pueden ayudar a un compañero que resbaló, ofrézcanle la mano y háganlo
con lealtad, poniéndose al lado de él y dándole fuerza con tus palabras de
aliento. Esto es sembrando ayudas que en algún momento es lo que nosotros mismos
vamos a recibir cuando lo necesitemos y lo más importante es seguir caminando.
Muchas
ocasiones no disfrutarán de grandes riquezas y lujos de diferentes clases, pero
siempre tendrán la frente alta y con mucha dignidad al gozar de un deber
cumplido, sintiéndose fuertes y sintiéndose amados, integrando una familia que
es la piedra angular de la riqueza que tienen siempre a su lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario