Durante el prolongado porfiriato, las largas chimeneas industriales vendrían a compartir el el monopolio de las altas y pesadas cúpulas inglesas. al mismo tiempo los silbatos de las fábricas y locomotoras inglesas comenzaban a distorsionar el sonido de las campanas.
La mística ciudad de Orizaba, siendo al mismo tiempo pluviosilla, se convirtió en uno de los principales centros fabriles de la modernidad, lo demostrarían las manifestaciones masivas por la apertura de los tiempos durante el año de 1937.
La vocación industrial de la zona, data desde la manufactura del tabaco iniciada en los años del Virreinato y el primer antecedente sólido, sería la fábrica de Cocolapam, iniciada en 1836 por el industrial Lucas Alamán, ya que en el año 1841, ocupaba a 1.220 obreros de planta.
Fue la fábrica textil más grande del país a mediados del siglo XIX, su instalación revolucionó la economía de la ciudad de Orizaba, al hacer crecer la oferta de empleo en todas sus variantes. Estos antecedentes son los que tenemos conocidos en la Historia Industrial.
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