Como es costumbre nos reunimos el día sábado 9 anterior en el local acostumbrado y en esta ocasión nos reunimos con gusto 17 asistentes, que departimos con mucha alegría y actualizamos comentarios que habían ocurrido en últimas fechas.
En esta ocasión se contó con la presencia de dos cumpleañeros a los que festejamos con mucho cariño y bajo el rito del acostumbrado pastel, departimos con suficiente gozo y alegría su onomástico con aplausos y abrazos y las muestras de cariño de todos nosotros.
Siguió la acostumbrada reunión y hubo de todo: saludos comentarios, abrazos, y buen gusto en el desayuno con duración de dos horas para saborear los deliciosos platillos que con agrado ordenó cada quien, y finalmente llegaran las despedidas y muestras de cariño familiar de todos los asistentes.
Estas reuniones, son muy útiles porque se demuestra el deseo del saludo que de otra manera sería difícil llegar a las visitas de antaño, por la forma de vida rápida que se tiene en los tiempos actuales en esta gran ciudad.
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