Continúan los reconocimientos de Organismos internacionales para genio s
mexicanos que han destacado en nuestro país y son reconocidos a nivel mundial.
Ahora correspondió a la Doctora en investigación biomédica “ESPERANZA MARTINEZ
ROMERO” por sus 40 años de trabajo quien inició su labor en el Centro de
Investigación de Nitrògeno, hoy Centro de Ciencias Genòmicas de la UNAM. Experimentando
el efecto de las bacterias en las plantas.
Cuando ella empezó a describir lo que iban a hacer los alumnos que iban a trabajar
desde el principio dijo: “Yo quiero hacer eso. A mì me quedó clarìsimo, porque
yo veìa otras licenciaturas y no me convencían. Cuando vi èsta dije. “Sì, sì,
justo eso”, recuerda la investigadora.
Yo creo en ese momento nadie nos dàbamos cuenta bien a bien que
repercusiones tenía. Fue solamente después cuando decidí hacer estancias de investigación
en Alemania, en un laboratorio en Bielefeld, ya estando contratada como
investigadora en la UNAM.
Dedicada al estudio de esta convivencia entre bacterias plantas y animales
le ha valido a ella múltiples reconocimientos, siendo el más reciente el premio
L*Oreal UNESCO para las Mujeres en la Ciencia anunciado el 11 de febrero y que
se entregará el 12 de Marzo, fecha en que se conmemora el Día Internacional de
la Mujer y la Niña en la Ciencia.
Actualmente han integrado ella y su grupo han extendido su estudio a otros insectos
y animales. Por ejemplo tienen una colaboración con la Universidad Autònoma del
Estado de Morelos y la UAM para analizar la microbiòtica intestinal de los
teporingos, que son unos conejitos de los volcanes que están actualmente en
riesgo de extinción.
Èstos se alimentan de unos zacatones y las bacterias del intestino les ayudan
a degradar las fibras porque son de muy difícil digestión. Un trabajo semejante
se hizo con los Koalas en Australia y encontraron que para degradar los
eucaliptos que son muy ricos en taninos, se necesitan unas bacterias especiales
porque no cualquier bacteria degrada taninos de los eucaliptos. Estas bacterias
se pasan de madres a hijos.
Pensamos que los teporingos tienen su microbiòtica intestinal especializada
Puntualiza la experta. “Recae en las bacterias la digestión de estos
compuestos y en el caso de los teporingos y koalas tienen otras dietas ricas en
materiales vegetales tienen ciertas bacterias para degradarlos.
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