El
año pasado tuve oportunidad de hacer un blog cuando la intención de Donald Trump
fue terminar con la protección para jóvenes indocumentados conocidos como “drimers”.
El juez federal de distrito John Bates ordenó a la Administración por primera
vez, reabrir el programa para los llegados en la infancia (DACA) a nuevas
solicitudes. Esta decisión se aplicará hasta dentro de 90 días.
Esta
fue una medida arbitraria y caprichosa en sí misma y por estas razones fue
ilegal y debe ser anulada, señaló el Juez Bates. Esta es la tercera ocasión que
un juez federal exige reactivar el programa que protege la deportación a cerca
de 690 mil jóvenes migrantes indocumentados, de los cuales el 80 % de ellos son
de origen mexicano.
En
el mes de enero pasado, un juez federal de Califonia ordenó al Gobierno,
continuar recibiendo las solicitudes de renovación de DACA y a esos esfuerzos sumó otro magistrado con residencia en Nueva York, por lo que con este ordenamiento
cerca de 30 mil jóvenes indocumentados pudieron renovar sus solicitudes en el
mes de abril.
La
Suprema Corte de Justicia de ese país decidió no entrometerse por el momento en
la lucha judicial, la urgencia para resolver la situación de los migrantes quedó
relegada. Si en estos 90 días no existe mejor explicación, el Departamento de
Seguridad Interior deberá reabrir el programa.
Durante
todo este tiempo que ha durado la lucha para deportar a los drimers, se han
realizado una serie de marchas, ordenadas protestas y plantones ante la Casa Blanca,
realizada por los jóvenes que durante casi un año no sabían cual podría ser su
futuro. Cierto es que una gran mayoría son hijos de padres mexicanos, pero toda
su vida la han realizado en los Estados Unidos y varios de ellos ni siquiera
hablan el idioma español.
Esta
tregua ha sido un respiro para que todos ellos decidan su situación de
continuar sus estudios y realizarse profesionalmente en ese país que
propiamente consideran como su segunda patria donde han cursado sus estudios y
varios de ellos tienen empleos en empresas americanas.
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