El Capricho. |
Esta
semana ha sido de recuperación de mi cirugía y por lo mismo he tenido
oportunidad de que vuelen por mi mente muchas idea que generalmente se nos
pueden ocurrir cuando estamos en el ocio y se dispone de mucho tiempo para hilvanar
cosas que pasaron anteriormente y algunas otras que por lo mismo, son
ficticias.
Por
lo que a mí respecta me inquieta que la mentalidad de “ocioso” puede extenderse como una epidemia y muchas
veces lo que a uno le pasa, puede convertirse en conmovedor y en estos casos
procede eliminar esas ideas porque todos
estamos sujetos a que ocurran cosas inesperadas y lo importante es darles
una solución adecuada.
Me
recuerda mucho el caso de Víctor Frankl, quien nos enseñó la forma tan
conmovedora en su libro “La Búsqueda humana de un sentido”, donde describe la
vida del autor cuando se encontraba detenido en un campo de concentración nazi,
a pesar de su difícil situación, pudo sobreponerse en todo momento a su
conmovedor cuadro, al grado de haber dejado el pensamiento siguiente:
“Todo puede ser quitado a un hombre, salvo
una cosa, la última de las libertades humanas: elegir la propia actitud en
cualquier conjunto de circunstancias, elegir el propio camino. La forma en que
un hombre acepte su destino y todo el sufrimiento que acarrea la forma en que
acepte su cruz, le da la gran oportunidad –aun en la más difícil de las
circunstancias- de agregar un sentido más profundo a su vida”.
Si
disponemos de alguna elección, podemos elegir cómo deseamos reaccionar ante
cualquier situación. La actitud de considerarse víctima de algo mal, no tiene
lugar en la vida saludable, por ser una situación enferma y carece de poder. La
mejor decisión a podemos considerar y mostrar una elección de nuestra actitud,
para a partir de allí, aceptar la responsabilidad de nuestras experiencias de
vida.
Esto
quiere decir no guardar rencores ni reprochar a nadie de lo que estemos:
-haciendo, siendo, teniendo o sintiendo- en la mayoría de las ocasiones en
nuestra vida, nosotros somos los actores y las creencias que tenemos se originaron en la infancia y las aplicamos
actualmente a nosotros mismos.
Tenemos
el caso de la salud, es un tema de vital importancia para todos al menos
teóricamente. Y considero teóricamente, porque muchas personas consideran la
salud como algo prioritario en su vida y conozco muchas gentes que: fuman
demasiado, beben alcohol sin alguna limitación, son comedores compulsivos y no
prestan atención a lo que “teóricamente” piensan y dicen. Lo que resulta
contraproducente.
Lo
mejor en todos los casos es cuidarse y considero que lo más preciado en la
salud es “La calidad de Vida” para nuestro bienestar y la seguridad de quienes
nos rodean.
No hay comentarios:
Publicar un comentario