No existe la menor duda que la frecuencia hace la costumbre, porque lo que se inició con una reunión de hacerla cada semana hace treinta y un años por una pareja familiar, se estableció como costumbre que ese desayuno permaneciera activo hoy en día y sirve para conservar las reuniones familiares mensuales en el lugar de costumbre.
La familia Aviña López es muy numerosa y la reuniones han servido para conservar el nexo de unión que les ha servido para conservar lo que ahora se observa y es muy difícil conservar por los desapegos familiares actuales que ahora existen en nuestro país.
La que se ve actualmente en numerosas familias donde los hijos desde edades menores no soportan el yugo familiar y desisten la autoridad familiar, y se independizan para hacer su vida por su cuenta lo cual no es muy recomendable,
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