En Londres Alguien recomendó los servicios de cierto periodista joven un tal Charles Dickens alegre novelista y talentoso muchacho de 24 años de edad, dotado de fogoso talento humorístico, y de una rara de genio y energía, uno de los mayores triunfos en la historia de la literatura. La actividad del novelista y tal vez singular y tal vez no se ha visto nada singular, se considera uno de los mayores triunfos registrados en los anales de la literatura.
Las tres primeras entregas la serie de la que era protagonista Samuel Pickwod negociante obeso ya jubilado fueron un desalentador fracaso. En tal punto Dickens introdujo en la narración a un obeso muchacho de los barrio bajos londinenses al que dio el nombre de Sam Weller. De ahí en adelante la novelesca serie se convirtió en mina de oro puro y en el punto de partida de la carrera de Charles Dickens.
Al crear a Pikwik dio vida a la que es sin duda la pareja cómica más eminente de la literatura universal. Apenas ocupó el desenvuelto Sam el puesto de mozo y angel guardián del inocente Sam Pickwik los críticos literarios dieron en ocuparse de amo y criado y los lectores en buscar ávidamente las entregas de la obra.
A los pocos meses cada entrega alcanzaba una venta de 40.000 ejemplares y la afición a Pikwik se extendía por toda Inglaterra, hasta alcanzar las proporciones de una verdadera locura. Con el nombre de Pikwik se fabricaban cigarros, sombreros y bastones, con el de Weller, pantalones y muy pronto apareció una orda de imitadores de Pickwik.
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