La tecnología ha invadido la educación escolar en nuestro país y se observa en el salón de clases, desde que los niños aprenden a leer hasta los estudios que cursan en la universidad, la educación escolar se está transformando con los nuevos métodos didácticos digitales y en línea.
La tecnología no está sustituyendo la instrucción de los niños sino apoyándola. Aun se espera que los alumnos aprendan las tablas de multiplicar y ortografía, pero todo el tiempo estamos buscando nuevas técnicas de mejorar el aprendizaje y hacer participar la nueva tecnología.
Atrás quedaron los días en que la única persona en el aula que tenía acceso al conocimiento era el maestro. Ahora está disponible para todos con solo tocar una pantalla o hacer un “clic” en internet, esto implica un cambio fundamental en la función de los profesores.
En tiempos remotos teníamos que aprender los nombres de los ríos en orden alfabético. Esto no tiene mucho sentido en la educación actual, ya que los alumnos pueden recorrer el espacio de aprendizaje abierto a otros aspectos del aprendizaje como las reglas necesarias.
Las clases se centran más en mostrar conceptos con la idea de memorizar muchos datos e información, ya que aprender de memoria no es tan útil. En un futuro que ya estamos viviendo, las empresas buscarán personal que sea innovador para evaluar información y trabajar en equipo.
El mayor cambio se ha dado en la actitud del alumno, cuando se le concede el poder de tomar decisiones sobre el material de estudio y repasar el contenido. En vez de ser receptores pasivos, participan mucho más activamente en construir su propia educación. Disponen de mayores elementos para ampliar sus investigaciones
Un cambio más drástico está ocurriendo en las universidades donde los estudiantes pueden participar en prácticas virtuales de laboratorio sin necesidad de utilizar equipo costoso, utilizando la era digital, donde el alumno reacciona muy positivamente ante estos nuevos sistemas de enseñanza.
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