TERMINANDO EL AÑO ENTRE NAVIDAD Y AÑO NUEVO,

 Se nos está terminado el año 2022 y estamos en el mes más gustado del año por ser de fiestas, posadas, cenas familiares y reconocimiento de parientes y amigos que no hemos visto en largo tiempo, lo que nos hace hacer llamadas telefónicas para desearnos nuevos augurios y buena fortuna en todos los niveles, realizando viajes nacionales y al extranjero para reuniones de Navidad y Año Nuevo con nuestros familiares y amigos.

El espíritu de las fiestas decembrinas nos invita a la solidaridad, y las tres historias de "La alegría de dar" son grandes ejemplos de ella- Vecinos que se unen para apoyar a una familia en duelo en una Navidad inusual, un regalo que cambió la vida de un niño ciego y padres que realizan tradiciones navideñas para adaptarse a un nuevo país. 

Estos textos nos demuestran la capacidad de acciones que pueden parecer pequeñas pero que cargan un enorme significado. En fin de año es una época que nos hace mirar al pasado por reflexión y al futuro en busca de ser mejores personas. Son muchas las formas en que podemos encontrar nuevos rumbos para nosotros y los demás.

Dedicado cada uno de nosotros a atender a nuestros familiares y amigos no nos queda más que agradecer a un Ser superior todas nuestras conquistas obtenidas durante el presente año que está terminando y reforzar nuestros lazos de afecto y amistad con todos los que nos rodean, olvidar los momentos tristes y disponer del mejor ánimo para vivir un nuevo año con alegría y felicidad.

ENSEÑA A TUS HIJOS A DAR Y A COMPARTIR CON OTROS.

 Fomentar en ellos la generosidad es más de lo que parece, la filantropía nos llena el corazón, esta forma de vida vale la pena hacerla, La Filantropía nos llena el corazón y lo comparo con la alegría que algunos sienten cuando se compara con un bien natural muy costoso. Esta forma de vida vale la pena y es como cuando un niño de diez años llega a su casa sin su suéter escolar a pesar del intensos frío. Cuestionado por su madre, el chico respondió: "Un compañero perdió su suéter y su familia no ha podido comprarle otro"

La filantropía nos llena el corazón, yo la comparo con la alegría que siente cuando se compran una camioneta del año, esta forma de vida vale la pena para mí. Darme cuenta que la gente que menos tiene es la que me ha hecho ver las cosas en su justa dimensión. En general no  me interesa tener el mejor celular o la ropa de moda, mi mayor deseo es hacer alguna labor para ayudar a alguien.

La Filantropía considera que una de sus labores más trascendentes ha sido el espíritu caritativo que despierte a alguien en su forma más natural, es fácil si los niños lo ven al lado de sus padres cuando cumplen la misión de dar. pero también es importante que su participación sea agradable. Los padres influyen positivamente en la actitud de sus hijos hacia el trabajo voluntario.

Según la Corporación para el Servicio Nacional y Comunitario con sede en los Estados Unidos, casi 9 de cada 10 jóvenes que dan su tiempo, tienen padres y hermanos que no lo hacen, Por otra parte 6 de cada l0 cuyos padres tampoco lo hacen, acaban por no hacerlo. Conocemos el caso de Noruega, el 52 por ciento de la población realiza el trabajo voluntario. Pero en México solo el 1 por ciento de la población hace labor filantrópica.

DEBEMOS ALEGRARNOS DE ESTAR VIVIENDO ESTOS TIEMPOS.

 Los tiempos actuales jamás hubieran sido los mejores para vivir pero si consideramos todos los avances tecnológicos y científicos que ha habido en estas últimas fechas, debemos considerar que estamos viviendo tiempos mejores, a pesar de todas las opiniones negativas que con frecuencia escuchamos de la mayoría de la gente de otras generaciones anteriores.

En comparación con hace cincuenta años, el ser humano gana mejores remuneraciones, ingiere mejores alimentos, se reproducen mejor las generaciones de seres humanos y tiene una mejor esperanza de vida.  De hecho es difícil encontrar una esperanza de vida que esté peor ahora, que el siglo anterior, a pesar de que la población mundial ha aumentado considerablemente.

Los habitantes de las ciudades ocupan menos espacios, consumen menos energía y tienen menos impacto en los ecosistemas naturales que la gente del campo. Las ciudades del mundo hoy albergan a más de la mitad de la población humana pero ocupan menos superficie terrestre. Lo mejor que podemos hacer por el planeta es construir más rascacielos.

Si tú no naciste en el seno de una familia amorosa puedes formar una familia propia con parientes y amigos los vínculos de sangre son irrelevantes, siempre y cuando trates a tu familia como tal. Dar y aceptar amor debe ser una calle de dos vías. Debes ser una persona en quien los demás puedan confiar. Los estudios muestran que las personas más felices tienden a pensar en otras, no solo en sí mismas.

Las amistades pueden ser especialmente satisfactorias para las personas cuyos intereses pueden ser radicalmente distintos de los de las familias. Uno no puede escoger a sus parientes pero sí a sus amigos, a fin de crear una comunidad de apoyo de personas con ideas afines y pasiones similares. Parece que estamos programados para sentirnos más relajados y felices teniendo alrededor gente solidaria.