Cuando la memoria es capaz de
retener toda clase de información, es cuando los expertos dicen que tiene
capacidad de guardar capacidad para unos 50.000 volúmenes del tamaño de las
obras de Shakespeare.
Sin embargo, antes de los 70 años hay pocos signos de deterioro de la capacidad mental. Entre los de esa edad y los 80 la memoria de sucesos sigue siendo fiable, pero se empieza a tener dificultad para recordar hechos recientes y datos nuevos.
Ni el ejercicio físico ni el mental por separado constituyen una solución duradera. La actividad física aumenta la afluencia de sangre al cerebro, pero la mente no puede utilizar esta energía adicional si no se le da algo que hacer.
Una vez que se inicia la pérdida de las facultades mentales, no es probable que los ejercicios permitan recuperarlas, hay que empezar cuando todavía se es joven. Por lo visto aquí se aplica el principio “Lo que se usa se aguza”. No obstante, aun si la memoria ha comenzado a deteriorarse, puede que no sea demasiado tarde.
En la capacidad de recordar intervienen varias facultades mentales y distintas, es posible que algunas de ellas sigan intactas. A menudo ocurre que la información almacenada no se ha perdido, pero el cerebro no puede utilizarla porque el sistema de recuperación ya no funciona tan bien como antes.
Las fotos viejas son buenas para remontarse al pasado. De especial poder evocador son los olores y los sabores. Pero no todos los recuerdos son placenteros; también hay que saber olvidar.
Me parece muy importante esta reflexion porque la funcion mental es algo que nos distigue de los demas seres vivos y es uno de nuestros activos mas valiosos.
ResponderEliminarOjala que podamos llegar a esas edades disfrutando de una salud integral y la parte mental es fundamental