Todos tenemos una época de nuestra juventud, (18 a 22
años) en que tenemos predilección especial por una música preferida, algún(a)
artista en particular, algún compositor de moda o algún(a) cantante. En los
años 50 y 60, estaba de moda en música el bolero, en compositor Agustín Lara, y
en artista preferida fue Doris Day.
El día 13 de mayo que se difundió la noticia de la muerte
de Doris Day, (Doris Mary Ann Kappelhoff) me hizo recordar tantos pasajes de mi
vida en los años 50 y 60 del siglo pasado, de la actriz y cantante de voz dulce
cuyos dramas musicales y comedias inocentemente sensuales, la convirtieron en
una de las más grandes estrellas de mis años de juventud.
Popularizó la canción de Jay Livingston y Ray Evans que
se hizo famosa al ser interpretada por Doris Day en la película de Alfred
Hitchcok El Hombre que sabía demasiado
“ Qué será, será… El futuro no es algo que podamos ver” y que se ganó el Oscar
a la mejor canción original.
Poco se sabía de la vida privada de la pecosa rubia de
ojos azules: que había nacido en Cincinnati, católica, particularmente tímida,
su madre ama de casa, su familia era de raíces alemanas, cuando Doris cumplió
17 años se fue de gira con Les Brown Band y conoció a Al Jorden, el trombonista
con quien se casó en 1941, con el que procreò su único hijo Terry. Sus
compañeros afirman que nunca fue grosera ni prepotente.
A pesar de sus importantes éxitos en el cine, habiendo
filmado 39 películas y como intérprete de 600 canciones, su carrera la hizo con
varios altibajos, se casó 4 veces y en 1968 cuando se murió su tercer marido
Martín Melcher, descubrió que habìa perdido su dinero habiéndola dejado en la
ruina.
Siempre se distinguió por su amor hacia los animales por
lo que en l978, la actriz, cantante y activista fundó la “Doris Day Animal Foundation” en esas fechas ya era muy famosa
por ser la consentida del público por sus películas, sus canciones y el éxito
que tuvo en los años sesenta por su programa televisivo que tuvo “The Doris Day Show”.
Siempre disfruto de una excelente salud física para su
edad, hasta que contrajo recientemente un caso grave de pulmonía que fue el
motivo de su defunción. En los años recientes pasó gran parte de su tiempo
defendiendo el derecho de los animales.
Aunque estaba retirada de los espectáculos desde los años 80, Doris tenía tantos
seguidores que para el 2011 alcanzó el top 10 en el Reino Unido y en ese mismo
año recibió un premio a la trayectoria de la Asociación de críticos de Los
Angeles. En 2004 recibió la Medalla Presidencial de la Libertad.
¡Descanse en Paz!
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