El 25 de
mayo de 1918 abrió sus puertas al pueblo mexicano con la presencia de la actriz
Esperanza Iris y la asistencia del Presidente de la República de esa época Don
Venustiano Carranza e invitados especiales y con la presentación de la opereta
“La Duquesa del Bal Tabarín”. La construcción del Teatro se hizo en el año 1917
cuando la agitación de la Revolución no se había apagado, por lo que se le
considera como símbolo a la cultura de los habitantes de nuestra gran Ciudad.
En la
construcción del local, influyó mucho la opinión de su propietaria, porque el
espacio escénico tiene mucha relación a la visión de otros lugares en el
extranjero donde ella había actuado como es el caso de la edificación que pidió
fuera similar a la Scala de Milán.
El
teatro ha tenido en sí, sus momentos buenos desde la época de estreno, hasta
sus momentos malos que ha dejado de ser utilizado por cierres temporales. En
una de las reinauguraciones del Teatro que se llevó a cabo el 20 de noviembre
del año 1986 se le rindió un homenaje al cantante Pedro Vargas y desde el año l987
es considerado “Patrimonio Cultural de la Humanidad” por la UNESCO.
En l934
se inauguró el Teatro Nacional de Bellas Artes y con ello se relegó el uso del
Esperanza Iris. En ese año se transformó de Teatro en Cine durante 12 años. A
la muerte de Esperanza Iris en l984 sufrió su primer cierre temporal, en l986
sufrió un incendio en sus pisos 2 y 3, en 1996 sufrió su tercer cierre hasta
2002 en que Plácido Domingo presentó la “Zarzuela en México” y en esta larga
trayectoria es la forma en que se ha escrito la historia del Teatro Esperanza
Iris.
El 8 de
noviembre de 1962, falleció la diva Esperanza Iris, considerada como “La Reina
de la Opereta” y su funeral se llevó a cabo en el propio escenario de su
Teatro, lugar donde el pueblo de la Ciudad de México tuvo oportunidad de
desfilar ante su féretro y rendirle el último tributo.
¡Descanse en Paz la diva mexicana Esperanza
Iris! México la reconoce.
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