El domingo 19 de noviembre pasado, fuimos invitados a una comida que fue celebrada en el domicilio de nuestros hijos Rafael y Aida junto con otros familiares de ambos lados, lo cual nos dio mucho gusto y acudimos mi esposa Ma. Teresa, mi hijo Daniel y yo, por lo que fuimos puntuales y tuvimos la agradable sorpresa que estaba casi toda la familia reunida.
Entre la llegada de ambas familias los anfitriones nos dieron otra sorpresa aun mayor, cuando hizo su aparición ante todos los asistentes, de nuestro nieto Alejandro, que la noche anterior había llegado procedente de los Estados Unidos y todos los asistentes quedamos sorprendidos que sus papás lo invitaron a llegar a su casa desde la noche anterior.
En ese momento nos apresuramos todos a saludarlo y darle un cariñoso abrazo de bienvenida por ser un miembro de la familia que ha tenido muchos éxitos en el extranjero, además de 3 años de ausencia que toda la relación había sido telefónica y como de costumbre es necesario el trato directo para extender los lazos familiares.
Por estar cercanas las fiestas de fin de año tenemos la costumbre de reunirnos familiarmente y es posible que diciembre tiene varios días de celebraciones y cumpleaños por lo que tendremos varias oportunidades y motivos para disfrutar de momentos gratos con la terminación y cierre de año para esperar el siguiente, con la familia reunida.
Saludos a todos.
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