El respirador portátil de
emergencia para atención de pacientes de Covid- 19 desarrollado por el equipo
de Laboratorio de Instrumentación Espacial
(LINX) liderado por el científico Gustavo Medina Tanco, del Instituto de
Ciencias Nucleares de la UNAM.
El respirador puede mantener a una
persona viva respirando cuando esté en situación de paro respiratorio en
terapia intensiva. También en caso de que ese paciente comience a querer
respirar, sale de modo automático el ventilador le impone cómo respirar.
El ventilador detecta ese intento
del paciente y le da la respiración que la persona está pidiendo y la
maquinaria entra en acción, explica el doctor en ciencias Gustavo Medina Tanco
físico argentino con científicos de
UNAM.
El ventilador continúa, es mucho
más que una máquina de entregar aire. Tiene que entregar aire enriquecido con
oxígeno si es necesario, pero además tiene que poder retirar en forma eficiente
el CO2 que respira el paciente para no asfixiarlo lentamente.
Para lograr todo esto, se asesoraron
con especialistas como neumólogos y bioingenieros del Instituto Nacional de
Enfermedades Respiratorias INER y posteriormente probaron el respirador en el
pulmón artificial del Instituto Nacional de Ciencias médicas y Nutrición
Salvador Zubirán.
La última prueba se llevó a cabo en
la Facultad de Medicina Veterinaria, con resultados favorables para tener listo
el diseño de un respirador con 4 motores independientes, 4 fuentes de potencia
y dos procesadores en paralelo.
Comparte Gustavo Tanco: “Cuando yo
propuse hacer esto, con ventiladores disponibles y poderlos entregar a las
gentes que lo necesiten” de las motivaciones detrás del desarrollo que encabeza
Una[DRS1] determinación vigente, aún ante la incertidumbre
sobre cuándo podrían producirse.
La Pandemia no está para terminarse
mañana, entonces si pensamos que es importante tener esto listo porque
seguramente va a hacer falta para una mayor producción y lanzamiento al mercado
comercial para su conocimiento y distribución.